jueves, 24 de enero de 2008

Victima

Son ya tres lunas de tiempo
desde que siento aquel viento
de indescifrable tristeza
que embarga mi naturaleza.
Decían que tenía el alma dura
pero no sabían que solo era una armadura
los días de tristeza
que embargan mi naturaleza
me han hecho entender
que la vida es un comprender.
Un juicio divino me persigue
siento que el diablo es el fiscal
y solo mi madre es mi defensor
Un víctima en el medio
ya que no tuvo remedio
a su terrible mal
Su proyecciones reclaman;
con ferocidad
piden que mueran gentes;
sin piedad.
Dentro de esas gentes
estoy yo con mis gentes
tengo un poco de miedo
no por el castigo
sino porque no pude ser sincero conmigo
La vida es un comprender
y tengo que entender
que las penas
también tienen gotas de alegría.
Esa gotas de alegría
con su pelo ensortijado
con besos acalorados
y también esas gotas de antaño
con su muestras de cariño
su carita arrugada
pero con la vitalidad de un niño.
La culpa es relativa
te puede hacer mucho daño
pero también puede volverte un ermitaño.
Pobre víctima sin remedio
converso conmigo
y me dijo:
¡Ayudame amigo!.
Le tome la mano
y quise quitarle el daño
pero no soy bendecido
solamente fui educado
para controlar los daños.
Ahora sus proyecciones
piden cabezas
como si fueran cerezas.
Dos fuerzas me ayudan
las dos significan amor
que solo el corazón
puede darles valor.
Solo pido
al Dios divino
que cuando mire al cielo
o a un rascacielo
que mis dos amores
que miran hacia abajo
solo vean flores
y no tengan dolores.